Suena a mito. Pero ¿realmente existen los zapatos cómodos bonitos? Buenas noticias. Desde Trocadero te informamos de que sí existen. La clave está en saber elegirlos correctamente y para que aprendas a hacerlo sin ayuda de un personal shopper a continuación te damos las claves para que tú también puedas hacerlo.
Zapatos cómodos con tacón
Está claro que nada evitará que cuando lleves ocho horas subida a unos zapatos de tacón de ocho centímetros tengas ganas de cortarte los pies. Pero si ya sales de casa con una cierta molestia en ellos será inevitable que termines la noche o el día con los zapatos en la mano. La clave está en elegirlos bien ya en el momento de la compra. Para ello debes prestar atención a cuestiones como:
El número adecuado
Suena evidente pero no siempre sabemos elegir el número que necesitamos para un par de zapatos en concreto. A veces este no coincide con el número que usamos habitualmente debido al patrón del zapato, y en ese caso conviene probarse un número más y uno menos del nuestro. Si aun así seguimos teniendo dudas, es preferible que nos quede un poco grande (podríamos ponerle unas plantillas) a que nos quede demasiado justo y nos termine haciendo una herida.
El material en el que esté fabricado
Las pieles de origen animal (cordero, vaca, cabra, potro) son mucho más flexibles y por tanto resultan menos duras en contacto con la piel que los materiales sintéticos. Decantarnos por un zapato de calidad fabricado en piel natural reducirá las posibilidades de que nos salgan molestas ampollas o rozaduras.
La punta
Los zapatos con punta estrecha suelen resultar más incómodos que los de punta redondeada, especialmente para aquellas mujeres con los pies más anchos. Por lo que la clave es elegir la punta que mejor se adapte a la forma de nuestro pie. Si ya en la tienda, estando de pie, notamos que nos aprieta los deditos, lo mejor es desterrar ese par de zapatos.
La altura del tacón
Los médicos suelen recomendar que la altura del tacón no sobrepase los 5 centímetros para no dañar nuestra columna vertebral y nuestras rodillas al invertir el reparto natural del peso del cuerpo sobre los pies. Pero si te ves en la situación de tener que llevar un zapato más alto, un truco puede ser recurrir a zapatos con plataforma, puesto que ésta hace que sea más cómodo caminar con ellos.
Esperamos que este post os haya ayudado a saber que sí, existen los zapatos cómodos bonitos. Nosotros nos vamos pisando fuerte (sobre unos Trocadero, por supuesto).
¡Hasta la próxima!